Lucir como todo un gentleman no es tarea fácil, lo más importante es comprender el propósito principal del traje masculino, siendo este: dirigir la atención de las personas hacia el rostro. Al mismo tiempo, aunque el estilo está relacionado con la tendencia y la ocasión, históricamente la elegancia está vinculada con los tipos de traje.
El traje americano es uno de ellos, la chaqueta se caracteriza por sus líneas rectas, es larga, de mangas amplias, de las que sobresalen los extremos de la camisa que rodean las muñecas. Igualmente, tiene un corte en la espalda, no marca la cintura ni entalla la figura masculina, sus hombros ajustados pero moderados y los bolsillos están elaborados con doblez recto. En cuanto al tipo de solapa, es alta, ancha y de forma redondeada.
El traje americano está compuesto por un pantalón palazzo, de talle alto y corte recto, ubicado por encima de las caderas, con cintura alta y no tiene pinzas. Además, es holgado y cae sobre el zapato; sin embargo, este estilo masculino no realza o favorece la figura del hombre, busca principalmente la comodidad.
El traje americano sólo lleva chaleco en eventos importantes; adicionalmente, el pañuelo se incluye de manera discreta, debe exceder uno o dos dedos el bolsillo del saco y el dobladillo puede ser en pico o rectangular. Es importante destacar que, el traje de estilo americano va evolucionando con el tiempo, esto implica cualidades más elegantes y actuales.
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